El agua siempre ha tenido una connotación erótica que, para algunas personas, es motivo de inspiración de muchos de sus deseos, sobre todo en el verano.
Dejar volar la imaginación dentro de una piscina privada o frente al mar es fantástico, siempre y cuando sepamos algunas peculiaridades de esta práctica sexual.
Pero antes de nada debeis tener en cuenta ¡¡la protección!! y no me refiero solamente a la crema solar para la piel, sino, a que el hecho de tener encuentros sexuales en el agua no significa que no enfrentemos los mismos riesgos que si los tenemos fuera de este medio.
Precauciones
Es importante saber que el agua no favorece la lubricación vaginal, lo que dificulta la penetración. Sin embargo, esto se puede solucionar con un lubricante de base siliconada. En cuanto al preservativo, debemos tener en cuenta que es altamente probable que se rompa, por lo que deberíais plantearos otro tipo de proteccion. Y en caso de utilizarlo es conveniente colocarlo con el pene erecto, como en otras circunstancias, pero mejor fuera del agua, aunque después se pueda tener el encuentro dentro del medio, vigilando que no se rompa. También el preservativo puede secarse, lo que se solucionaría con lubricante (pero en este caso de base acuosa)
En la piscina
Si estás dispuesta a disfrutar del sexo sin importarte el lugar entonces adelante, pero si eres un poco precavida ten en cuenta que si te encuentras en una piscina que no es la de tu casa, puede tener mucha cantidad de cloro y al tener contacto con tu vagina puede causarte alguna irritación luego de terminadas las relaciones sexuales.
En la bañera
Este sería un muy buen lugar para tener relaciones sexuales, ya que el agua de las bañeras es casi siempre libre de cloro. Ahora bien, solo tendrás que concentrarte en buscar las posiciones sexuales más cómodas dentro de la bañera y sobre todo poner un tapete o alfombra de caucho en el fondo de la bañera para no deslizarte. Busca materiales antideslizantes que te permitan estabilidad y que así puedes tener acceso a casi cualquier posición.
En el mar
Si bien el agua salada no será muy amable con tu vagina y puede causarte luego una leve molestia, ese no sería el principal problema a evitar, sino buscar un punto donde la marea no esté tan fuerte como para arrasarte y tampoco tan suave como para que en algún momento te quede a las rodillas y todos te vean teniendo relaciones bajo el agua. También busca pararte en un lugar donde no te hundas mucho!!
La erótica del agua
El medio acuático puede proporcionar un espacio discreto para intentar caricias, juegos y experiencias más atrevidas. La piel es la gran olvidada de los encuentros sexuales, que solemos centrar en los genitales, con lo cual las sensaciones eróticas que se reciben en el agua pueden ser muy novedosas para muchas personas y muy convenientes
En el sexo bajo el agua no hay reglas ni recetas universales, por lo que para algunas personas puede ser placentero, pero para otras no. Lo importante es conocerse y saber comunicar y negociar bien los gustos y preferencias con la pareja, tanto si se trata de una pareja estable, como de una pareja ocasional (que con estas también se puede negociar.
Lo mejor que podemos hacer es probar, pero siempre con protección y mente abierta.
¿Nos mojamos?
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